El BMW Z4 es la esencia de lo que debe ser un roadster de BMW por su diseño y por sus cualidades de conducción. Conducir un Z4 significa experimentar la conducción más pura disfrutando con todos los sentidos.
No solamente es expresión de una parte del nuevo diseño de BMW, sino que en muchos aspectos establece un nuevo listón de referencia en el segmento de los biplaza descapotables por su presencia, aplomo, deportividad y estética, por su manejabilidad precisa y segura para un máximo placer al conducir.
El nuevo biplaza debuta con los modelos Z4 3.0i con un propulsor de seis cilindros en línea, 170 kW/231 CV y caja de cambios manual de seis marchas y Z4 2.5i con motor también de seis cilindros en línea, 141 kW/192 CV y caja de cambios de cinco marchas. Ambos modelos se lanzaron al mercado estadounidense en otoño de 2002 y en Europa se estrenarán en la primavera de 2003.
Las proporciones del Z4 son impresionantes: morro largo, salpicadero hecho a medida, zaga corta y compacta. No hay otro roadster en el mercado con proporciones similares. La distancia entre ejes de 2.495 milímetros y el ancho entre ruedas de 1.781 mm constituyen un nuevo listón de referencia en el segmento de los biplaza, mientras que los 4.091 milímetros de largo corresponden a un deportivo relativamente compacto. En su conjunto, se trata de un coche con voladizos pequeños sin un solo gramo de peso demás.
El Z4 tiene dos líneas de cintura. La inferior empieza en el capó, atraviesa la puerta y sube en la zaga. Estas formas transmiten potencia, recuerdan a los clásicos roadster sin puertas, con lo que el Z4 adquiere un carácter inconfundible. La superior marca un arco de tensión óptica desde el inicio del capó hasta el final de la zaga. Otra línea marcada es la de la puerta que asciende oblicuamente hacia atrás, tendiendo un arco adicional de tensión óptica.
El diseño es único en su género, ya que conjuga superficies planas, cantos, redondeces y entradas tridimensionales visibles y tangibles, alternando formas cóncavas y convexas. De esta manera se producen líneas marcadas, sombras y zonas brillantes que hacen resaltar con mayor nitidez las proporciones del roadster.
El BMW Z4 tiene una capota que al plegarse ahorra espacio. Además, permite colocar el segmento delantero sobre la capota plegada de tal manera que termine a ras con la carrocería. Por ello, el Z4 puede prescindir de una lona o tapa para cubrir la capota plegada. El nuevo biplaza de BMW es el único roadster del mundo que se puede adquirir opcionalmente con una capota completamente automática.
El Z4 se lanza al mercado dotado de excelentes motores de seis cilindros en línea de BMW que ya merecieron grandes elogios, como lo demuestran los premios internacionales que recibieron este año. El biplaza está equipado con las dos variantes máximas de los propulsores de seis cilindros: el motor de 2.500 cc con 141 kW/192 CV a 6.000 r.p.m. y el de 3.000 cc con 170 kW/ 231 CV a 5.900 r.p.m. Con ellos, el Z4 acelera de 0 a 100 km/h en 7,0 y 5,9 segundos respectivamente, mientras que la velocidad punta es de 235 km/h y de 250 km/h en uno y otro caso.
Los conductores que prefieren un estilo de conducción más deportiva pueden pulsar una simple tecla para que el motor responda con más ímpetu. El sistema opcional de control dinámico de la conducción FDC (siglas en alemán/inglés por Fahr Dynamic Control) activa más pronto la potencia del motor en la modalidad «Sport». En estas circunstancias, la centralita del motor aplica una línea característica más deportiva en función de la posición del pedal del acelerador. Al mismo tiempo cambia también la característica de la dirección, activándose una relación más directa para una conducción más deportiva, en armonía con la respuesta más espontánea al acelerador. El sistema de dirección asistida eléctrica EPS (del inglés Electric Power Steering) interviene en función de la velocidad y recurre a una línea característica también más deportiva. Si el coche está equipado con la caja de cambios opcional SMG o con la caja automática, activando la modalidad «Sport» el sistema FDC adicionalmente permite revolucionar más el motor en cada marcha y, además, se consigue cambiar de marchas más rápidamente.
El Z4 es el primer BMW que lleva una dirección asistida electrónicamente en vez de hidráulicamente. Ello significa que el ajuste de las características de la dirección de efectúa mediante software, con lo que el sistema EPS es más versátil a la hora de realizar un ajuste óptimo para conjugar una suficiente amortiguación de la dirección y, al mismo tiempo, permitir que el conductor perciba suficientemente el estado de la calzada al volante. A diferencia de la dirección hidráulica convencional, con el sistema EPS no consume energía alguna al conducir en recta sin que se mueva el volante. De esta manera se ahorra hasta un litro de combustible a los 400 kilómetros en comparación con la dirección hidráulica convencional.
El Z4 2.5i está equipado de serie con una caja de cambios de cinco marchas, mientras que el Z4 3.0i tiene una caja de seis marchas. Ambos modelos pueden equiparse opcionalmente con una caja SMG de seis marchas. Esta caja tipo «shift by wire» permite cambiar de marchas con la palanca convencional o, a modo de alternativa, con las levas del volante, lo que tiene la ventaja de no retirar la mano del volante, con lo que el conductor puede concentrarse plenamente en el tráfico. La caja SMG ha sido concebida especialmente para los conductores que prefieren un estilo deportivo, ya que permite cambiar de marchas en un tiempo mínimo de hasta 0,15 segundos. Además, esta operación siempre se efectúa con máxima precisión, ya que el conductor no tiene que pisar un pedal de embrague. Opcionalmente y a un precio mayor, se puede adquirir para el Z4 la caja de cambios automática de cinco marchas (Steptronic), de probada eficiencia.
El dinamismo, la agilidad y deportividad del Z4 se explican por la extrema rigidez de la carrocería y por la calidad de su chasis. El chasis procede del BMW Serie 3, aunque ha sido modificado para perfeccionar la maniobrabilidad, ya de por sí excelente, del coupé de la serie 3, por ejemplo. La distribución equitativa del peso sobre los ejes constituye una característica idónea para un comportamiento muy armonioso del biplaza. A ello se viene a sumar la tracción en las ruedas posteriores, una ventaja decisiva, especialmente tratándose de un coche deportivo, ya que la dirección no se ve afectada por influencias de la fuerza de tracción. De este modo, el conductor disfruta de la gran precisión de la dirección que siempre le informa sobre el estado de la calzada.
El Z4 está equipado de serie con el sistema de control dinámico de la estabilidad DSC. En el caso del roadster, el chasis ofrece tantas reservas de seguridad que el DSC sólo interviene en situaciones realmente críticas y no se utiliza como medio auxiliar para compensar deficiencias del chasis.
El comprador de un Z4 equipado con DSC puede adquirir adicionalmente el nuevo sistema de control dinámico de la tracción DTC para conseguir una adaptación aún más precisa al estilo de conducción. Pulsando la tecla DTC, el sistema permite un resbalamiento mayor de las ruedas traseras, de tal modo que un Z4 con el sistema DTC activado se conduce con la misma agilidad que con un bloqueo del diferencial convencional, aunque sin prescindir de las funciones del sistema de control dinámico de la estabilidad DSC en situaciones límite.
El Z4 fue concebido desde un principio como biplaza descapotable.
Este planteamiento redunda en un resultado que se percibe con claridad:
su rigidez torsional de 14.500 Nm/grado duplica el valor de su antecesor, el Z3 (5.600 Nm/grado). En el segmento de los descapotables y roadster, el Z4 es el primero en tener una carrocería tan rígida. Por ello fue posible anular de modo convincente el conflicto existente entre una amortiguación cómoda, similar a la de una berlina, y una suspensión dinámica y deportiva.
La seguridad pasiva que protege al conductor y a su acompañante depende fundamentalmente de estructura de la carrocería. En el caso del Z4, la carrocería es muy resistente gracias a la utilización de aceros altamente rígidos. La columna A asume las funciones de barra antivuelco y se suma a las dos barras antivuelco de acero detrás de los asientos. El Z4 lleva de serie cuatro airbags y la versión destinada al mercado estadounidense tiene adicionalmente dos airbags para las rodillas. Los airbags se controlan mediante el nuevo sistema de electrónico ASE (del inglés Advanced Safety Electronics), el primero que funciona con conductores de fibra óptica y con el que BMW vuelve a marcar un hito en la evolución de la tecnología de seguridad.
El Z4 se ofrece de serie con neumáticos tipo «runflat» a prueba de pinchazos. Con estos neumáticos suele ser posible llegar hasta el siguiente taller sin tener que cambiar de rueda deteniendo el coche en zonas peligrosas. Estos neumáticos con funcionamiento de emergencia se controlan de serie mediante un sistema de medición relativa de la presión que detecta cualquier diferencia de presión debido a las diferencias de giro de una o varias ruedas, para lo que basta rodar una distancia relativamente corta. En caso de constatarse una pérdida de presión, el conductor recibe un aviso óptico.
El Z4 puede dotarse de una amplia gama de equipos opcionales. Concretamente, el nuevo roadster puede equiparse con faros bi-xenón.
Los amantes de la buena música pueden escoger entre dos equipos de alta fidelidad, especialmente desarrollados y optimados para el Z4. Eligiendo el sistema de alta fidelidad «Professional», se dispone de la tecnología Carver, poco usual en un automóvil. Con esta tecnología se aprovecha el volumen disponible para generar una presión máxima de las ondas sonoras.
El sistema combinado de radio y navegación, integrado en el salpicadero, recurre a los datos grabados en un DVD, una solución que BMW aplica por primera vez. Este soporte de datos tiene una capacidad superior, por lo que incluye los datos de una superficie geográfica mayor. El sistema de navegación «Professional» dispone además de una pantalla abatible en la parte superior del salpicadero. La imagen de esta pantalla de alta tecnología es extraordinariamente nítida y permite una fácil lectura. Ambos sistemas de navegación pueden combinarse opcionalmente con un teléfono montado de modo fijo en el coche.
