Llega el sexto Megane Coupe-Cabriolet

Apenas se tardan 22 segundos en pasar de una a otra configuración. Renault ha sido capaz de introducir en un vehículo de estas características (segmento M1) un techo de esta naturaleza. Para que, cuando se adopte la configuración Coupé, el conductor siga pudiendo disfrutar “a cielo abierto”, a través del techo de cristal. Que cuenta con una cortinilla protectora en su interior.

En este vehículo no es preciso decidir de antemano la configuración que se desea adoptar. Ni tampoco es necesario encontrar un lugar para almacenar elementos. Por supuesto, si las condiciones meteorológicas cambian, basta una simple presión en la tecla situada cerca del freno de mano, para adoptar la configuración deseada. Así de simple.

Tres escalones de motorización

No es usual encontrar en este tipo de vehículos la motorización de ciclo Diesel. Y sin embargo, Renault innova – de nuevo – al proponer tres escalones de motorización. Dos en gasolina y uno en ciclo Diesel.

En gasolina, los propulsores seleccionados son los K4M y F4R, cuya denominación interna responde a los de 1.6 y 2 litros de cilindrada (ambos con culata de 16 válvulas) que proporcionan, respectivamente, 115 y 136 CV. Estos dos propulsores cuentan con un sistema desfasador del árbol de levas de admisión, que les produce un incremento notable de potencia en las fases de aceleración. Cuentan con árboles de levas huecos (lo que supone una ganancia de peso importante) y las levas empujan a los accionadores de las válvulas mediante rodillos, con una importante reducción de rozamientos, garantía de una respuesta inmediata.

Tercer escalón es el propulsor de ciclo Diesel F9Q 800. Este motor 1.9 dCi Common Rail proporciona 120 CV de potencia y representa en la actualidad uno de los propulsores más brillantes de combustión interna.

En cuanto a cajas de velocidades, se ha recurrido a las de selección manual de 5 marchas para el propulsor 1.6 de gasolina, en tanto que los motores 2.0 y 1.9 dCi incorporan la caja de seis marchas. Está prevista la incorporación opcional de una caja de velocidades automática Proactiva DP0 en los motores de gasolina.

Seguridad

Recientemente, Renault ha anunciado que un quinto modelo de su gama, ha alcanzado la calificación de “cinco estrellas” en el test de seguridad Euro NCAP, en el que ningún fabricante puede exhibir, como lo hace Renault con legítimo orgullo, el hecho de poder ofrecer cinco modelos en tan reducido club.

Los Renault Coupé – Cabriolet, lógicamente aprovechan las experiencias adquiridas en los laboratorios de seguridad y de biomecánica, en los que 600 técnicos altamente cualificados, empleando 100 millones de eduros al año, tratan de elevar aún más el listón de la seguridad en los vehículos Renault.

Como elementos de seguridad activa cabe destacar la estructura realizada en aceros TTHLE (muy alto límite elástico) y Dual Phase (que ofrecen un excelente comportamiento estructural a la hora de realizar piezas por embutición). Esta estructura cuenta con una gran parte de elementos que provienen de los Renault Mégane de 3 y 5 puertas y de otras piezas específicas.

A este nivel de seguridad activa hay que añadir, como no podía ser de otra manera, los sistemas ABS, S.A.F.E., ESP, etc.

Como elementos de seguridad pasiva, este vehículo cuenta con 6 airbags de serie (dos frontales, dos laterales y otros dos que van ubicados en los asientos delanteros y que evitan el tan temido “submarinado”), pretensores pirotécnicos, limitadores de esfuerzo, anclajes Isofix y arcos de seguridad fijos o (en opción) móviles.

Estilo exterior e interior

No cabe la menor duda. Es un Renault Mégane. Asi lo atestigua el diseño de la parte frontal. Un diedro en el que se enseñorea el rombo, rodeado de aireadores. Un perfil en el que se aprecia la reducción de la batalla y el aumento del voladizo trasero (tomando como referencia su hermano de gama berlina de 5 puertas), capaz de ofrecer un maletero de hasta 490 litros en configuración Coupé. Claro que, quien adquiere un vehículo de este tipo, nunca lo decide por la capacidad del maletero que, en configuración cabriolet y una vez albergado el techo en su interior, asciende a 190 litros.

No lleva rueda de repuesto. En su lugar, el usuario cuenta con un aerosol anti pinchazos con el que poder solventar la incidencia y poder acudir a la estación de servicio más próxima. Opcionalmente, puede incorporar un kit de reparación que cuenta con un compresor y líquido para neutralizar el pinchazo.

Gama española

Conjugada en dos niveles de equipamiento (Confort y Luxe), sobre tres ambientes (Authentique, Dynamique y Privilége), al ofrecer tres niveles de motorización, la gama española que inicia su andadura en la segunda quincena del próximo mes de noviembre, contará con 9 variantes a las que se podrá añadir la posibilidad de incorporar la caja de velocidades automática en motorización de gasolina.

Precios

Renault Coupé – Cabriolet abre un abanico que, en la Península y Baleares se inicia en los 19.165 € del Confort Authentique con motor 1.6 de 16 válvulas, hasta los 24.615 € del Luxe Privilège con motor 1.9 dCi de 120 CV.

Objetivos

La llegada del Renault Coupé – Cabriolet tiene como misión ofrecer un vehículo diferente a un público distinto. Renault se ha fijado como objetivo, superar la cifra de las 100.000 unidades de Renault Mégane vendidas en nuestro país a lo largo del próximo año 2004, consiguiendo de nuevo el liderato de la marca en el mercado español de turismos.

Con una comercialización que dará comienzo a primeros del mes de noviembre de 2003, la cifra total de ventas de Renault Coupé – Cabriolet a velocidad de crucero, se estima en torno a las 1.000 unidades al año.

Primer vehículo del mercado que dispone de un techo de cristal rígido escamotable de serie, el Renault Coupé – Cabriolet puede cambiar entre una y otra configuración en tan solo 22 segundos.

En su interior, dispone de cuatro plazas y un maletero digno de un berlina. Verdadero “talón de Aquiles” en el diseño de estos coches, Renault ha sabido resolver el problema, proporcionando un volumen de 490 litros en la configuración Coupé, en tanto que, para la configuración Cabriolet, el maletero se reduce a 190 litros que sigue siendo un volumen importante para un vehículo de este tipo.

El cambio de configuración se realiza de una manera sencilla. Basta pulsar de manera continuada un botón y al cabo de 22 segundos, el vehículo cambia de configuración. No es preciso, por tanto, decidir al comienzo de la jornada el tipo de vehículo, ni andar manipulando los elementos, ni decidiendo dónde se han de almacenar, en virtud de una pretendida polivalencia.

Conductor al volante, vehículo parado, motor en marcha, basta una simple presión en un accionador, para que el universo de los Coupé - Cabriolet se manifieste en todo su esplendor.

Elegancia y distinción

La polivalencia de un vehículo no significa que este no sea elegante. La llegada del Renault Coupé - Cabriolet reafirma un diseño 100% Renault a la búsqueda de un dinamismo y de un equilibrio tanto en su adopción Cabriolet como en la de Coupé.

El diseño exterior es armonioso y muy dinámico. Las líneas afirman la modernidad y fluidez de estilo que de él se desprende, nada más verlo. Con una longitud de 4.35 metros, la silueta alargada del recién llegado, proporciona una sensación diferente, como si el nuevo Renault Coupé - Cabriolet no perteneciera al segmento de los M1.

El Renault Coupé - Cabriolet afirma con orgullo su pertenencia a la familia Renault Mégane. En la parte delantera, el estilo de faros, la presencia de rejillas de ventilación de forma trapezoidal y un rombo de generosas proporciones que se enseñorea en el borde de ataque, marca claramente un aire de estilo en el que, no obstante, tan solo el frente delantero, faros y capot provienen del Nuevo Renault Mégane. A las aletas delanteras, parabrisas, montantes de vano y triángulos de retrovisores se les aplica un tratamiento específico que prolonga los costados de la carrocería y realza la esbelta línea del vehículo.

El parabrisas dispone de una inclinación que aumenta la sensación de dinamismo tanto en su utilización Coupé como Cabriolet. La línea curva esbozada por los montantes del parabrisas colaboran a un diseño del techo que, en la posición Coupé, se prolonga con la luneta trasera.

El techo de cristal es rígido, pero Renault ha sido capaz de que sea escamoteable de serie. Y para ello ha desarrollado – junto con Karmann – la posibilidad de que, por vez primera, un cabriolet en este segmento de mercado pueda disponer de un techo rígido de cristal que ofrece un interior muy luminoso y que, al plegarse, se aloja en el maletero.

En el interior, el nuevo Renault Coupé - Cabriolet incorpora el tablero de bordo procedente de sus hermanos de gama. Los asientos se encuentran 24 mm más bajos. Al igual que el resto de la gama, se ha diseñado el habitáculo como un puesto de pilotaje. Con todos los mandos y accionadores al alcance de la mano. La visera, con un doble arco, recuerda brevemente al mundo de la moto. Las esferas del velocímetro y en general todo el cuadro de instrumentos, rezuma ambiente elegante y deportivo.

El interior ha sido cuidado hasta en el mínimo detalle. Se ha utilizado un nuevo material “slush” en la cofia del salpicadero que optimiza la calidad percibida gracias a su efecto de tacto suave. Los mandos de las puertas son otro ejemplo de la elegancia de estos vehículos, con un tratamiento satinado.

Con el programa Mégane, Renault ha querido democratizar la oferta. Así se ha pasado de “un coche para todos” a “coche para cada cual”. El programa de personalización tiene en cuenta que en los dos niveles de equipamiento, que adquieren la denominación transversal de Confort y Luxe, se puedan conjugar los distintos ambientes Authentique, Dyamique y Privilege.

De esta manera, el cliente puede elegir entre 2 niveles de equipamiento, 3 ambientes, tres motorizaciones (dos de gasolina y una de ciclo Diesel) y dentro de las de gasolina (1.6 y 2.0 litros) caja de velocidades de selección manual (con 5 o 6 marchas) o automática (con 4 marchas).

Cada ambiente conjuga los detalles exteriores e interiores en función de dos tendencias asociadas a su vez a dos armonías de salpicadero: tono oscuro para los Authentique y Dynamique y tono claro para Privilege.

Por primera vez, un techo rígido de cristal, escamoteable de serie.

Por primera vez en la historia, un vehículo incorpora un techo de cristal rígido escamoteable de serie. Con este elemento el Coupé ofrece la posibilidad de una apertura permanente al mundo exterior, para poderse poner “el cielo por montera”.

Este techo de cristal es una invitación seria y formal para viajar bajo el cielo en configuración Cabriolet o a buen resguardo de las inclemencias del tiempo – aprovechando la inmensa luminosidad interior – en configuración Coupé. Y el paso de uno a otro se realiza en 22 segundos...

Karmann, un especialista.

Hacer un vehículo Coupé - Cabriolet no consiste en que lleve un techo “de quita y pon”. Eso sería lo fácil. Renault se ha distinguido siempre por incorporar soluciones acertadas, novedosas, ingeniosas y sobre todo, prácticas. Y llegó al acuerdo con Karmann, (continuando una larga colaboración que dio comienzo en 1.987) contando con la ingeniería de Ital Design – Giuggiaro, en que la solución estaba en que el vehículo incorporase un techo de cristal, rígido, por tanto, pero que fuera capaz de plegarse. El módulo, que pesa del orden de 78 kg, consta de un techo de cristal que se pliega en V en dos partes (con un peso total de 15 kg) y su correspondiente mecanismo de activación hidráulico.

Los módulos de techo se fabrican y se ensamblan íntegramente en la factoría alemana de Karmann. A continuación se trasladan listos para su incorporación al coche a la factoría Renault de Douai, protegidos por embalajes específicos con una disposición que corresponde a su colocación en el vehículo.

El hecho de que el techo sea de cristal, dota al Renault Coupé - Cabriolet de una luminosidad impresionante que se ve acentuada por las amplias superficies laterales acristaladas y por la ausencia de marcos en las puertas. La luneta trasera dispone de un sistema de desempañado clásico a base de filamentos eléctricos.

Como además, el techo es rígido, le procura un excelente confort térmico. El cristal utilizado (Venus 40 de 3.15 mm de espesor) junto a la cortina quitasol y el degradado del esmaltado de la luneta, completan la protección solar. Según niveles de equipamiento, lleva climatización automática o manual (Luxe o Confort, en el caso del mercado español).

Otra de las ventajas de un techo rígido es, sin duda, un mayor confort acústico. Este techo garantiza un aislamiento superior en 2 dB al de un clásico techo de lona. Los ruidos debidos a la aerodinámica, que pueden percibirse y notarse en un Cabriolet normal, quedan atenuados en el Renault Coupé - Cabriolet.

La transformación de Coupé en Cabriolet y viceversa, se realiza con el coche parado, pulsando un botón situado en las proximidades del freno de mano (de tipo aviación, como en el resto de la familia Renault Mégane de 3 o de 5 puertas). En tan solo 22 segundos, se abren (o cierran) los cuatro cristales (puertas y custodias) la puerta del maletero y el techo se pliega o despliega, entrando (o saliendo) del maletero. Para advertir al conductor de que se da por finalizada la operación, se produce un pitido. El techo viaja en el interior del maletero sujeto por unos topes elásticos y un cierre mecánico, para evitar todo daño.

En el caso de que el conductor desee circular con las cuatro ventanillas bajadas, acciona un segundo pulsador y el descenso de los cuatro cristales posibilita rodar a pleno aire, con el techo cerrado.

Para el plegado / desplegado del techo, el sistema dispone de un bloque hidráulico situado en la parte trasera izquierda del maletero y cuenta con un motor, unidad de control y relés de bomba. Unido a la red multiplexada, la unidad de control pilota las electroválvulas y los cinco pistones de cierre: dos para la apertura del maletero, dos para el desplazamiento del techo y un quinto, para asegurar el techo en el montante del parabrisas

Confort de uso diario.

En el diseño de los Renault Coupé - Cabriolet se ha tenido en cuenta que cualquiera de las cuatro plazas debe ofrecer un confort de uso diario, similar a las del resto de ocupantes. Tanto los ocupantes de las plazas delanteras como los de las traseras, gozan de unas condiciones de habitabilidad importantes. Los asientos delanteros están situados 24 mm más bajos que los de sus hermanos de gama y la habitabilidad vertical se ha aumentado 15 mm respecto al anterior Mégane Cabrio. Para ello se les ha dotado de un sistema de reglaje de –20 mm a + 30 mm y según niveles de equipamiento, reglaje lumbar.

Como en el Renault Mégane de 3 puertas, el Renault Coupé - Cabriolet dispone de asientos delanteros con sistema de memorización de posiciones tanto de la deslizadera como del respaldo. Los reposa cabezas incorporan un sistema de regulación constante y en el asiento del pasajero delantero así como en los asientos traseros, se puede instalar un asiento normalizado para niños.

En la parte trasera, Renault Coupé - Cabriolet, propone una habitabilidad transversal de 1.166 mm. La distancia al techo es de 819 mm y el radio disponible para las rodillas es de 85 mm, es decir, el doble que lo que ofrecía el Mégane Carnio. En el Renault Coupé - Cabriolet, los respaldos de los asientos traseros están inclinados 21º y disponen de arcos de seguridad recubiertos de una espuma blanda. Estos arcos fijos pueden ser (opcionalmente) móviles que se activan cuando el momento de vuelco supere un valor umbral.

La comodidad en el uso diario cuenta con pequeños detalles que, no obstante, resultan de una gran eficacia. Como por ejemplo, los cuatro elevalunas eléctricos y el mando para plegar los espejos retrovisores que, de esta manera, quedan protegidos. Asimismo y cuando el vehículo está ocupado por solo dos pasajeros, se ofrece en opción una red que evita remolinos a conductor y pasajero. Esta red, al evitar estas perturbaciones aerodinámicas, reduce las molestias en la nuca y piernas de los pasajeros.

Renault Coupé - Cabriolet ha sido diseñado para cuatro pasajeros y sus equipajes. El habitáculo dispone de algunos compartimientos como la guantera (con capacidad de 17 litros) refrigerada (si lleva climatización, obviamente) que se condena cuando se cierran las puertas para evitar cualquier “mala tentación” cuando el coche se mantiene en configuración Cabriolet.

Otro espacio guarda objetos está situado entre los asientos delanteros. Con una capacidad de 6 litros, dispone de apoyabrazos para una posición más cómoda. A estos huecos hay que añadir los de las puertas bajo los apoyacodos (con una capacidad de un litro cada uno) y otros guarda objetos con posibilidad de ubicar botes de refresco. En total, en el interior del Renault Coupé - Cabriolet, el volumen de almacenamiento es de 31 litros.

Hablando de volumen, el maletero del Renault Coupé - Cabriolet, auténtico “talón de Aquiles” en el diseño de este tipo de vehículos ha sido resuelto por Renault de una manera soberbia. En configuración Coupé, el maletero ofrece una capacidad de 490 litros. Capacidad sorprendente para un Coupé, máxime si se tiene en cuenta que, por poner un ejemplo, el maletero de un Renault Mégane Classic (referencia en el segmento) era de 540 litros.

Lógicamente, en configuración Cabriolet, este volumen disminuye necesariamente para ubicar el techo plegable, ofreciendo, no obstante, un volumen de 190 litros.

Al volante, los usuarios de Renault Coupé - Cabriolet experimentan nuevas sensaciones y un confort de manejo al más alto nivel. Comenzando por la postura al volante. Con un volante regulable en altura y profundidad, cada conductor puede encontrar la posición más adecuada a su morfología.

Los mandos y accionadores se encuentran al alcance de la mano, agrupados de una manera intuitiva. El pomo de la palanca de velocidades, se encuentra en una posición natural, favoreciendo la precisión en su manejo.

Rigidez y elasticidad de la estructura.

Punto importante en el diseño de los cabriolet es, sin duda, su aspecto vibratorio. Debido a la especial conformación, hace que la rigidez del vehículo esté basada sola y exclusivamente en la plataforma. Evidentemente, todas las soluciones incorporadas para rigidez del vehículo deben centrarse en la base, para limitar las deformaciones. En un cabriolet, si no se controla la resonancia de los elementos de la carrocería, se llega a situaciones de incomodidad en marcha o en parado, a deformidades que pueden perjudicar el funcionamiento del techo o el de las puertas. En otras palabras, si no se refuerza debidamente, no hay manera de que los elementos practicables encajen.

A la hora de diseñar un vehículo de estas características, hay que prestar especial atención a la rigidez lateral y a la estructura longitudinal. En ese punto, el diseño de doble piso ha posibilitado implantar refuerzos entre el túnel y los largueros laterales.

Porque, evidentemente, uno de los problemas importantes a los que se enfrentan los diseñadores es conjugar debidamente rigidez y elasticidad. Desarrollado sobre la misma plataforma de los Renault Mégane, los Renault Coupé - Cabriolet disponen de una batalla algo más corta que los de 5 puertas. Exactamente 103 mm, lo que sitúa la batalla en 2.522 mm. La longitud es de 4.355 mm frente a la del Renault Mégane que es de 4.209. Voladizo delantero y trasero, evidentemente han variado.

El diseño de la carrocería ha recurrido a la aplicación de aceros TTHLE de muy alto límite elástico. La estructura, por su parte, ha sido reforzada en numerosos puntos. Hay dos tabiques (inferior y superior) que unen los costados de la carrocería detrás de la banqueta trasera. Hay otra unión estructural que refuerza la unión entre el tabique inferior y el piso. Al contrario de lo que sucede en el Mégane berlina (de 5 puertas), en el Coupé - Cabriolet, el costado de la carrocería está recortado en tres partes diferentes, lo que posibilita reforzar las zonas sometidas a fuertes esfuerzos.

Además de toda la protección frente a un choque frontal, los Coupé - Cabriolet están expuestos al peor de los accidentes que pueden ocurrir en este tipo de coche: el vuelco. En ese caso, hay que procurar que la línea imaginaria desde el reposa cabezas trasero hasta la traviesa superior del parabrisas, albergue las cabezas de los ocupantes y si fuera necesario, incorporar opcionalmente un sistema de arcos de seguridad desplegables.

El Renault Coupé – Cabriolet dispone de una protección formada por unos arcos de tubo acodado de 35 mm de diámetro y de 3,5 mm de espesor, que van situados por detrás de los pasajeros traseros. Estos arcos fijos pueden ser (opcionalmente) móviles.

En caso de que los dispositivos inerciales detecten un momento de vuelco que pudiera llevar inherente el vuelco, desbloquean de manera automática un sistema de retención (puesto en tensión mediante unos muelles) que, al activarse, despliegan los arcos (130 mm, en menos de medio segundo).

Los asientos traseros y el delantero del acompañante, pueden asimismo recibir un asiento normalizado para niños Isofix. En el caso de instalarlo en el del pasajero delantero, hay que inhibir el airbag de pasajero y el de anti deslizamiento, mediante llave.

Base rodante.

Como en sus hermanos de gama, los trenes rodantes delantero y trasero ofrecen un comportamiento irreprochable, afectándoles muy poco el viento lateral, perfil de la carretera o transferencias de masas en las fases de frenado o aceleración.

El tren delantero es (como viene sucediendo en la práctica totalidad de todos los coches modernos) de geometría “falsa Mac Pherson” a base de un brazo inferior y una mini cuna filtrada. Esta solución proporciona una gran rigidez transversal a la vez que absorbe los choques longitudinales, mejorando ambos aspectos el confort. Por su parte, la cuna filtrada limita la transmisión de la cadena vibratoria eliminando la transmisión de oscilaciones al habitáculo. En otras palabras, el tren delantero es más rígido y reactivo, lo que asegura un comportamiento dinámico más estable en curvas, con deformaciones mínimas.

En lo que respecta al tren trasero, este consta de un eje flexible con perfil de deformación programada, asociado a unos muelles helicoidales. Esta solución controla los rebotes verticales y asegura una precisión de guiado, garantía de un mayor confort.

El Renault Coupé - Cabriolet tiene un reparto diferente de masas. Es preciso recordar que su batalla (distancia entre ejes), es menor y que su longitud total es mayor. Por tanto, el tarado de suspensiones es, necesariamente, distinto de los de sus hermanos de gama.

Las dimensiones de las ruedas, que varían con arreglo a la motorización y equipamiento son de 6.5 J en llanta de 15, 16 o de 17 pulgadas. Los neumáticos son de 195/65 R15, 205/55 R16, 205/60 R16 y 205/55 R17. En cualquier caso, el estudiado perfil y generoso ancho de esta monta, garantiza una total seguridad al volante, con una trazada firme y segura.

En el plano del guiado, el Renault Coupé - Cabriolet cuenta con una dirección asistida variable de funcionamiento eléctrico que reúne las dos características más apreciadas de estos mecanismos: manejabilidad a baja velocidad y precisión a alta velocidad. Cuenta con 16 leyes específicas en función de diferentes parámetros de conducción, procurando en cada caso, la tasa de asistencia más adecuada a cada necesidad. De esta manera, a baja velocidad, las maniobras se facilitan enormemente, en tanto que a alta velocidad, la precisión de guiado provoca un “tacto duro” que evita la siempre desagradable sensación de que el morro del coche “flota” y que con estos dispositivos, desaparece.

Los Renault Coupé - Cabriolet incorporan opcionalmente en nuestro mercado, el sistema electrónico de estabilidad ESP con función de subvirado como un resultado de las investigaciones conjuntas de Renault y de Bosch.

El ESP es un dispositivo que, sin sustituir al conductor, le ayuda a restituir la trayectoria más adecuada al vehículo. Para ello cuenta con la información que le proporcionan diferentes acelerómetros longitudinales y transversales que analiza en permanencia con el ángulo de volante, actuando sobre el freno de una, dos, tres o las cuatro ruedas, con el fin de situar el vehículo en la trayectoria más segura.

En cuanto a dispositivo de frenado, Renault Coupé - Cabriolet cuenta con frenos de discos en las cuatro ruedas. Los delanteros son ventilados y su diámetro es de 280 mm, los traseros tienen un diámetro de 240 mm. Equipado con un dispositivo ABS Bosch 8.0 de última generación, asociado al repartidor electrónico de frenada EBV y el S.A.F.E. (Sistema de Ayuda a la Frenada de Emergencia), este recién llegado ofrece una frenada segura y enérgica, pero firme y progresiva. Además, si el cliente lo desea, puede incorporar como elemento de opción el sistema de control de la presión de los neumáticos que le indica en cada momento, la presión de cada rueda.

Seguridad pasiva:

Renault Coupé - Cabriolet cuenta con todos los adelantos técnicos que han hecho de sus hermanos de gama, el tercer y quinto modelo de Renault en disponer de las “cinco estrellas” en el test de seguridad Euro NCAP.

Incorpora seis Airbags: dos Airbags frontales adaptativos, otros dos Airbags anti deslizamiento y otros dos combinados de cabeza y tórax. La configuración Cabriolet no permite la incorporación de los airbag de ventana.

Cuenta, además, con unos arcos destinados a los pasajeros traseros para una mayor protección en caso de vuelco. Estos arcos, que pueden ser desplegables opcionalmente, procuran una protección eficaz a los pasajeros siempre y cuando – obvio resulta decirlo – lleven abrochados convenientemente el cinturón de seguridad.

Tres motores: dos de gasolina y uno en ciclo Diesel

Nuevamente Renault ha vuelto a sorprender, al ofrecer en el segmento de los Coupé - Cabriolet, un motor de ciclo Diesel que, junto a otros dos de gasolina de última generación, conforman el abanico de opciones.

En lo que se refiere a los motores de gasolina, se han seleccionado dos de ellos, de 1.6 y 2 litros de cilindrada. Ambos, con culata de 4 válvulas por cilindro, doble árbol de levas hueco, accionamiento por rodillo y distribución variable con decalador del árbol de levas de admisión, procuran unas excelentes prestaciones y unos reducidos consumos. Ambos propulsores están dotados con una caja de mariposas motorizada para un más preciso control del motor.

En lo que se refiere al motor de ciclo Diesel, se ha recurrido al motor 1.9 dCi de 120 cv. Verdadera “joya de la corona”, este motor ofrece un par motor de 300 Nm (30.6 mKg) medidos a 2.000 vueltas debido a una modificación en los parámetros del calculador.

En lo que se refiere a cajas de velocidades, las hay de selección manual de 5 o de 6 marchas. La de 5 para el motor 1.6 de 16v y la de 6 marchas para los motores de gasolina de 2 litros y el de ciclo Diesel 1.9 dCi de 120 cv. Además, el los próximos meses, también habrá posibilidad de incorporar opcionalmente una caja de velocidades de selección automática Proactiva DP0 en los motores de gasolina. Con un funcionamiento automático y secuencial, la caja DP0 sorprende por su funcionamiento gestionado mediante leyes auto adaptativas que, teniendo en cuenta los parámetros de la carretera, motor y forma de conducir, adaptan a cada instante el umbral de cambio, situándolo en el régimen de vueltas más apropiado a cada circunstancia.

Soluciones inteligentes.

Al diseñar el Coupé - Cabriolet, Renault ha recurrido a una serie de elementos cuya astucia está basada en la inteligencia y en la sencillez. Inauguradas algunas de ellas en el Renault Mégane y otras en el Nuevo Renault Scénic, Renault Coupé - Cabriolet ofrece un abanico de soluciones tecnológicas inteligentes, dirigidas a hacer más fácil la vida del automovilista.

La ausencia de rueda de repuesto está solventada por un sistema aerosol o (en opción) por un kit de reparación que consta de una bomba de presión accionada por la batería del propio coche.

Los retrovisores exteriores (según versiones) son abatibles eléctricamente mediante una sencilla rotación del botón de regulación eléctrico. El espejo retrovisor interior es, por otra parte, electro cromado en la versión de equipamiento Luxe.

Opcionalmente, como toda la familia Mégane, incorpora limitador / regulador de velocidad que posibilita mantener una velocidad programada o bien fijar una velocidad límite que no se desea rebasar. Asimismo, se ofrece como opción, la iluminación de Xenon con faros acoplados a un sistema automático que corrige el alcance del haz en función de la velocidad del coche y de la carga.

Con un dispositivo de encendido automático de faros (de una tremenda utilidad al entrar en túneles o cuando se hace de noche) el sistema de alumbrado, además, se puede temporizar mediante una función “follow me home” que consiste en mantener las luces encendidas un tiempo (que puede variar de 30 segundos a 2 minutos) con el fin de que el usuario pueda realizar el camino hasta la puerta de la casa, del garaje, etc.

Paralelo al captador de encendido de faros, se encuentra el captador de lluvia que pone en marcha los limpiaparabrisas delanteros cuando se detectan algunas gotas de lluvia. Este limpiaparabrisas, además, adapta la velocidad y frecuencia de barrido a dos aspectos: cantidad de lluvia detectada en el sensor y velocidad del vehículo.

En lo que se refiere a la apertura y puesta en marcha, Renault hace tiempo que popularizó el sistema de arranque mediante tarjeta que puede ser de telemando o “manos libres”. Tanto en uno como en otro caso, el nivel de seguridad alcanzado es importante, ya que solamente se produce el arranque del motor después de que los sistemas se hayan interrogado entre sí y se haya autorizado la maniobra, condicionada al hecho de pisar el pedal del embrague o del freno para poner en marcha el vehículo.

En lo que se refiere a sistemas de ayuda a la conducción, Renault Coupé - Cabriolet cuenta con un sistema de Navegación Carminat en el que, en una pantalla de formato 16/9 a color se suministran informaciones sobre el trayecto, tiempo de llegada estimado, informaciones relativas al tráfico en las carreteras principales, etc.

Finalmente, como ya se viene incorporando en los vehículos modernos Renault a partir de la aparición de Vel Satis (Espace y programa Mégane), el Renault Coupé - Cabriolet cuenta con un tapón integrado de combustible que evita salpicaduras, suciedad y olores. Este sistema posibilita realizar el repostaje sencillamente introduciendo la pipa de llenado en la boca de carga que tiene un tapón activado con un muelle que se cierra, al retirar la manguera.

Gama española

Renault Coupé – Cabriolet se conjuga en España en torno a dos niveles de equipamiento y tres de motorización, declinados en 3 ambientes. A este abanico hay que añadir la posibilidad de adaptar caja de velocidades automática en opción, con lo que el abanico de opciones queda de la manera siguiente:

 

	Confort	Luxe
1.6 16v 115 cv	Authentique Dynamique
2.0 16v 136 cv	Dynamique	Dynamique Privilege
1.9 dCi 120 cv	Authentique Dynamique	Dynamique Privilege

La gama de vehículos Renault Coupé - Cabriolet, hace suya la denominación del resto de hermanos de gama Renault Mégane. Los niveles de equipamiento son Confort y Luxe, declinados cada uno de ellos en dos ambientes. En el ambiente Confort, los ambientes son Authentique y Dynamique, en tanto que los de nivel de equipamiento Luxe, se declinan en Dynamique y Privilège.

Cada ambiente juega con los detalles exteriores (empuñaduras de puertas, bandas de protección delantera y trasera de los paragolpes, llantas de aluminio o embellecedores), conjugadas a su vez sobre 2 tendencias asociadas a 2 armonías en el tablero de bordo. Una armonía oscura para Authentique y Dynamique y una armonía clara para Privilège.

En el primer nivel, Confort, el Renault Coupé - Cabriolet cuenta con ABS que viene equipado con EBV y Sistema de Asistencia a la Frenada de Emergencia, con encendido de las luces de emergencia (warning) en caso de frenada de urgencia, Airbags frontales de conductor y pasajero adaptativos, Airbags anti deslizamiento bajo el cojín de los asientos delanteros, Airbags laterales de cabeza – tórax en los asientos delanteros, encendido automático de faros, arcos de seguridad fijos, guantera iluminada y refrigerada, bomba-aerosol anti pinchazos, tarjeta Renault con cierre centralizado de practicables, cinturón de seguridad de 3 puntos, climatización manual, dirección asistida variable eléctrica, limpiaprabrisas con cadenciador y sensor de lluvia, elevalunas eléctricos, ordenador de a bordo, techo rígido escamoteable en cristal, radio mono CD 4x15w con satélite de mando en el volante, recirculación de aire, sistema Isofix en plazas traseras, volante regulable en altura y profundidad y un largo etcétera.

Como elementos opcionales, puede incorporar: arcos móviles de accionamiento automático, ESP y ASR con control de subviraje, red antirremolino, kit de reparación de neumáticos, caja de velocidades automática (en 1.6 y 2.0), regulador y limitador de velocidad, tarjeta Renault “manos libres”, climatización automática, preinstalación de teléfono, Radio 4x15w o 4 x 40 W, en ambos casos con lector de CD, cargador de 6 CD en fachada y tapicería de cuero en el ambiente Dynamique.

En el nivel de equipamiento Luxe, se añade: Tarjeta Renault con función “manos libres”, Radiosat 4 x 15W con lector de cassette y cargador de 6 CD, regulador y limitador de velocidad, retrovisor interior electrocromado, retrovisores exteriores replegables, climatización automática y sistema de control de la presión de los neumáticos.

En lo que respecta a opciones, puede incorporar: Arcos móviles de accionamiento automático, ESP con ASR y control de subviraje, Kit de reparación de neumáticos, red antirremolino, caja de velocidades automática (en la motorización de gasolina 2.0), faros de xenon y lavafaros, Carminat de Navegación asistida, preinstalación de teléfono y Radio 4x40w equipado con lector de CD, cargador de 6 CD en fachada y tapicería de cuero en ambiente Dynamique y Privilège.

Clientela de Renault Coupé - Cabriolet

Este vehículo ha sido diseñado para permitir el placer de viajar cómodamente a cuatro adultos (gracias a que dispone de la mejor habitabilidad del subsegmento) y su equipaje, con un maletero digno de un gran berlina.

Con este vehículo se trata de atraer a la clientela que busca diferenciación y placer, que valoran la línea y las prestaciones motrices. Para ello, los dos motores de gasolina (con 115 y 136 cv) ofrecen una elasticidad impresionante y el de ciclo Diesel, un rendimiento inmejorable.

Es un vehículo de los llamados “de conquista” ya que trata de seducir a poseedores de otros vehículos de tipo berlina e incluso de cabriolets, renovando la fidelidad de quienes ya hayan disfrutado de un cabriolet Renault (ya sea el antiguo Renault 19 o el Renault Mégane).

La importancia del segmento es innegable. En el año 2001, las ventas de coupés y cabriolets alcanzaron más del medio millón de unidades en toda Europa Occidental y en este contexto, mientras que las ventas de los Coupés se mantenían en una tendencia estable, la de los cabriolets se multiplicaba por 3 en los pasados 10 años.

En el mercado español, los cabriolet en el pasado 2002 alcanzaron la cifra de 10.515 unidades de las que aproximadamente la mitad de ellas pertenecían al segmento I2. El segmento de los vehículos de lujo (S) y del M2, junto a los del segmento M1 completaban este reparto.

En un contexto de mercado en el que no se prevén alteraciones importantes, las previsiones de Renault en España sobre el Renault Coupé - Cabriolet se fijan en torno a las 1.000 unidades al año completo, consolidando el objetivo de lograr unas ventas totales de Renault Mégane, superior a las 100.000 unidades en un año completo. La comercialización de estos recién llegados dará comienzo en la segunda quincena de noviembre.

Las ventas de Renault Mégane, establecidas ya a velocidad de crucero, estarán repartidas de la manera siguiente: Renault Mégane berlina 3 y 5 puertas, un 32%, la versión Sedán y Grand Tour harían un 15%, Scénic y Grand Scénic participarían un 47% y el 6% restante, el Coupé - Cabriolet.

Los motivos principales por los que un cliente compra un vehículo de este tipo se centran en la línea. El cliente quiere diferenciarse de los demás sobre un vehículo distinto.

El placer de viajar “a cielo abierto” (especialmente en la primavera y en el otoño en nuestro país) es difícilmente igualable en otro vehículo, aún con el techo abierto.

Otros factores que se tienen en cuenta, hacen referencia al precio, equipamiento, prestaciones, seguridad, prestigio, relación calidad / precio y reputación de la marca y/o del modelo.

El perfil del usuario de este tipo de vehículos (dentro del segmento de mercado M1) resulta una mezcla de los que provienen del Coupé y de los que se sienten atraídos por el Cabriolet. En líneas generales, podemos anunciar una clientela joven, amante de la vida al aire libre, conocedores de la tecnología, con una edad inferior a los 35 años, en la que predominan las mujeres, y con otro coche (o más) en el hogar.