El Cabriolet también es inconfundiblemente un 911. Una presencia elegante que no ha perdido nada en deportividad.

El trazado de líneas es claro y armónico. Con la capota cerrada, la transición hacia la trasera es plana, fluida y extremadamente dinámica.

El 911 Cabriolet alcanza coeficientes idénticos a los del Coupé en cuanto a penetración aerodinámica y fuerza ascensional. Ningún otro cabriolet puede equipararse.

Sus excelentes prestaciones de conducción, su comportamiento seguro incluso a altas velocidades, su reducidísimo nivel de ruidos en el interior, así como su bajo consumo debe agradecerlos el 911 Cabriolet en último término a estos valores aerodinámicos punta.
 

Póngase al descubierto. Sin pronunciar ni una sola palabra
Sencillamente pulsando un botón de la consola central. Enseguida descenderán las ventanillas. Simultáneamente y por completo. Mientras se abre el alojamiento de la capota, ésta se pliega en su interior. De forma completamente automática, como por arte de magia.

La capota se pliega en forma de Z. Se abre y cierra en apenas 20 segundos. La superficie exterior de la misma permanece así siempre hacia arriba y la cara interior bien protegida.

La capota del 911 Cabriolet dispone ahora de luneta térmica. Es menos vulnerable a las influencias exteriores y ofrece una excelente visión con la capota cerrada. Sobre todo en las estaciones frías. En caso necesario, la luneta trasera de cristal se puede sustituir rápida y sencillamente.

El revestimiento interior de la capota está fabricado con tejido insonorizante, y camufla el mecanismo de la misma en su totalidad. Esto permite mejorar el aislamiento térmico y vuelve más silencioso al 911 Cabriolet. Para que prácticamente no oiga otra cosa que el típico sonido Porsche.

El techo rígido. De serie. Está fabricado en aluminio de alta resistencia y pesa alrededor de 33 kg. Al contrario que el plástico, no se astilla al ser sometido a acciones mecánicas. La parte interior está forrada con un revestimiento textil con propiedades insonorizantes, y está diseñado a juego con el interior del vehículo.

911 es un número seguro
Esto lo demuestra una vez más el 911 Cabriolet. Posee una carrocería con un alto grado de rigidez y cuatro airbags, incluido el sistema de protección lateral Porsche Side Impact Protection System (POSIP) para conductor y acompañante.

También el 911 Cabriolet posee unos pilares A reforzados, así como un sistema de protección antivuelco de serie, que en caso de vuelco se despliega automáticamente.

Por lo demás, el Cabriolet también está disponible con tracción total integrada y el sistema Porsche Stability Management (PSM) de serie en la variante 911 Carrera 4 Cabriolet.

El panel cortavientos
Opcionalmente puede usted disponer de un panel cortavientos desarrollado en el túnel de viento Porsche. Garantiza una conducción sin corrientes molestas, se monta fácilmente y cabe plegado en el maletero.

Un motor de aleación ligera tiene ventajas e inconvenientes. La ventaja reside en el peso. El inconveniente es la intensa dilatación del material a elevadas temperaturas de servicio. Normalmente.

El 911 posee un puente de cojinetes para el cigüeñal realizado en aluminio, que incorpora elementos de fundición gris. De esta forma se reducen al mínimo las variaciones térmicas del juego de cojinetes, lo que reduce los ruidos en el motor, pudiendo prescindir del encapsulamiento antiacústico del motor. El problema se ataca en su origen.

El motor precisa menos aceite, bastándole con bombas de aceite compactas. Ello representa otra disminución de peso y de consumo de combustible e incrementa la potencia del motor.